Todo lo que necesitas saber sobre cables para energía eléctrica

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¿Qué son los cables eléctricos?


Los cables eléctricos son conductores compuestos por hilos metálicos recubiertos con un material aislante. Principalmente fabricados con cobre o aluminio, estos cables tienen la misión de transportar energía eléctrica de manera segura y eficiente desde la fuente de alimentación hasta los dispositivos que la consumen.

Tipos de Cables Eléctricos


Cables para baja tensión: son esenciales para la distribución de electricidad en entornos domésticos, comerciales e industriales. Estos cables garantizan un suministro eléctrico seguro y eficiente, conectando todo, desde electrodomésticos hasta sistemas de iluminación y pequeños equipos industriales.


Cables de media tensión: estos son utilizados principalmente en la distribución eléctrica industrial y urbana. Estos cables son cruciales para transportar electricidad desde las subestaciones hasta los centros de consumo, asegurando una entrega de energía estable y eficiente en infraestructuras grandes y redes eléctricas complejas.


Cables para construcción: indispensables en cualquier proyecto de edificación, los cables para construcción están diseñados para resistir condiciones adversas, como la humedad y el desgaste mecánico. Estos cables robustos y duraderos aseguran la energía necesaria para herramientas y maquinaria durante la obra, además de proveer conexiones eléctricas permanentes en la infraestructura terminada.


Cables flexibles: se adaptan a cualquier movimiento y curvatura sin comprometer su rendimiento. Son ideales para aplicaciones que requieren constante movilidad, como herramientas portátiles, electrodomésticos y equipos de sonido. Gracias a su estructura maleable, facilitan las instalaciones en espacios reducidos y garantizan una conexión eléctrica fiable y segura.


Cables para comunicaciones: los cables para comunicaciones son fundamentales para la transmisión de datos, voz y video. Utilizados en redes de telecomunicaciones, sistemas de internet y televisión, estos cables garantizan una comunicación rápida y clara, soportando desde la fibra óptica hasta cables coaxiales y pares trenzados.


Aluminio desnudo: se utiliza en líneas de transmisión y distribución de energía eléctrica. Con una excelente relación entre peso y conductividad, estos cables son ideales para tendidos largos y aéreos, minimizando el peso en las estructuras de soporte sin sacrificar eficiencia en la conducción de electricidad.


Cobre desnudo: el cobre desnudo es el material preferido para muchas aplicaciones eléctricas. Se utiliza en instalaciones de puesta a tierra, sistemas de pararrayos y conexiones eléctricas en general, garantizando una baja resistencia y una excelente fiabilidad en la transmisión de corriente.


Cables libres de halógenos: en Edemco, entendemos la importancia de la seguridad en cualquier entorno eléctrico. Es por eso que ofrecemos una variedad de cables libres de halógenos que no emiten gases tóxicos en caso de incendio. Estos cables son ideales para aplicaciones donde la seguridad contra incendios es una prioridad, como edificios públicos y comerciales.

¿Cómo utilizar los cables eléctricos de manera segura?

Selección adecuada: es crucial elegir el cable adecuado según la aplicación, teniendo en cuenta factores como la intensidad de corriente y el entorno de instalación. Por ejemplo, si deseas realizar en tu hogar un traslado de un toma desde un sitio a un punto mas visible, o hacer una ampliación de tu red eléctrica, o por el contrario, quieres reubicar aquella luminaria que quedó atravesada en el pasillo etc, puedes usar cables duplex calibre 12 o 14 acompañado de una canaleta plástica o bien, un cable encauchetado si lo vas a dejar expuesto, como por ejemplo, al utilizarlo con switches de sobreponer.


Instalación segura: es esencial evitar cruces y daños en el aislamiento mediante el uso de conductos apropiados. Los cables que comercializa Edemco se han diseñado pensando en la facilidad de instalación y un rendimiento óptimo, asegurando una colocación segura en cualquier entorno.



Mantenimiento regular: es importante realizar inspecciones periódicas en busca de daños o desgaste, y proceder con la reparación o el reemplazo según sea necesario. 


No obstante, te recomendamos que aquellos trabajos donde la electricidad sea el protagonista, te acompañes de un experto, si no cuentas con alguno, contáctanos, aqui te asesoramos.